Ya comentamos hace años, en el Blog de Apuntes de Toroimagen, que los políticos desembarcarían en la Fiesta, para utilizarla en su propio beneficio y por consiguiente para hacer de puntilleros de la misma.
El esperpento en que está hoy sumido el palco Maestrante, con las arbitrariedades en los nombramientos de presidentes, veterinarios y asesores, nos confirma el desmadre y nos hace dudar que tenga solución, mientras el público y la prensa dócil no cambien radicalmente.
El publico o sea el sevillano:
Atiborrados como estamos de santos y cofradías, la única hermandad que no existe en esta pía capital, es la Hermandad de la Santa Indignación.
Campan los pelotas y enchufados en sus gloriosas andas, envidiados por el pueblo llano, mientras gentes que hacen el martirologio de pagarse su propia entrada para ejercer el derecho a indignarse, son contemplados con cara de pena y conmiseración.
Y así nos luce pelo; los políticos, ya sin freno alguno, hacen de su capa un sayo, nombran a sus amigotes a puestos que no merecen y lo hacen con reiteración y recochineo. Nada, ni casi nadie, que diga esta boca es mía y esta dignidad también.
Carmen Tovar,,, verbi gratie Julián Salgueíro Presidente, amigo intimo
Carmen Tovar,,, “” “” Martín Cartaya Asesor , amigo intimo
Carmen Tovar,,, “” “” Álvaro Pedregosa Veterinario amigo, con puntuación profesional, cero patatero.
Carmen Tovar,,, verbi gratie Fernández-Figueroa Presidente, amigo y excompañero de trabajo en Diputación
La prensa local tiene material de trabajo más que suficiente para denunciar entuertos y defender con contundencia al lector, cliente y aficionado, ¡¡ si quisieran, pero están conchabados en el silencio cómplice, en su estilo secular de hablar con la boquita chica y de disparar con mortero parabólico no identificable. Andan habitualmente a la greña y la envidia de ver quien se lleva mejor con los que mandan y pueden dar algo, por ejemplo: una presentación pagada o un pase de temporada para ver los toros, a la sombra, por supuesto, o simplemente un tuteo y un abrazo cainita.
Bien es verdad que en este silencioso erial, donde Sevilla Taurina y la Unión de Aficionados aparecen como críticos desaforados, últimamente se divisan algunos brotes verdes en el horizonte.
Perjuicios todos, beneficios ningunos.
Con esta situación de desmadre político en el Palco Maestrante ¿quien se perjudica y quien se beneficia?
Se perjudica sobre todo la imagen de Sevilla y de los sevillanos, en este mundo digital donde las noticias rodean el planeta en decimas de segundo. Se perjudican los toros en general porque Sevilla es de las ciudades más importantes del mundo en tauromaquia, y en otras cosas también. La cultura taurina junto con el turismo y el flamenco, son nuestros mayores haberes.
? Quien se beneficia ¿pues pocos y por bien poco.
Los Maestrantes quizás algo, en el sentido de que estos políticos cobardes y lameculos, no le exigen las normas de seguridad que se deben de cumplir, y que cuestan dinero, (*) pero ya digo mas bien poco en comparación con la posible falta de interés y asistencia del aficionado. El Empresario, también poco, porque las facilidades que le pudieran dar estos presidentes en los corrales y en la orejas en el palco, las pierden de sobra en el deterioro del espectáculo. Saben que a estas alturas de la Fiesta, que ya no caben mas corridas podridas, ni mas arbitraridades en el palco, so pena de que el aficionado emigre definitivamente.
En esta santa ciudad, aquí paz y después gloria.
Paco Díaz
(*)
La guerra paralela de nuestros amigos socialistas, donde pudiendo pedir lo posible, piden lo imposible para que todo quede en nada.
Un ejemplo es el pedir que se cambien el tamaño de todos los asientos de la plaza a sabiendas de su enorme costo y dificultad, entablando un planteamiento estéril para que no prospere.
Por otra parte el crear pasillos de acceso en los tendidos, (obligatorios de ley y tan solicitados por todos los aficionados,) en ese caso no los exigen, porque saben que son muy factibles de hacer, ya que en no vendiendo esos 200-300 asientos y colocando unas barandillas, (también muy demandadas) seria suficiente y por lo tanto la perdida para la Propiedad y la Empresa sería inmediata.
Esta forma de hacer la guerra es muy de aquí, muy sevillana, donde los mejores interpretes de la misma fueron los reconocidos estrategas Felipe González Márquez y Alfonso Guerra. “yo de entrada le digo a usted que NO, pero salgo por donde usted mande”
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