TEMPORADA
2005 SEVILLA

                 


15 MAYO DOMINGO

NOVILLOS DE JUAN A. RUIZ ROMÁN

JUAN DEL ÁLAMO
LÓPEZ SIMÓN
RAFAEL CERRO

Tarde calurosa de verano, 8.000 espectadores.

Novillos de Juan Antonio Ruiz "Espartaco", muy bonitos y con presencia de toros,
nobles y un tanto descastados, flojos.

Juan del Álamo, silencio y saludos
López Simón, silencio y silencio
Rafael Cerro, oreja y silencio



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MISCELANIA

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RAFAEL CERRO: UN NOVILLERO CON POSIBILIDADES.

Primera novillada de abono en el coso del Baratillo. Mucho calor, los primeros tres toros en la solanera fueron agobiantes. Media plaza; parte de los abonados, algunos partidarios, los de gorra y muchos guiris, destacando sobremanera las seis señoritas del balcón 102, con unas hechuras y un trapío de plaza de primera. También destacar el palco maestrante, completamente desierto. Si no van los dueños…

La novillada de “Espartaco” estuvo muy bien presentada, más que novillos fueron toritos. Después de ver en Canal Sur la corrida de Osuna, cabe pensar que los novillos de “Espartaco” eran los padres de los toros de Osuna. Televisar ese tipo de espectáculos es nocivo para la fiesta. Aparte de la fachada de la novillada, salvo el tercer toro, el resto fue mansito, descastadito y con poquita clase.

Juan del Álamo, a pesar de lo plazeado que está, dice poco. Se le nota oficio y poco más. El segundo de su lote hubiera tenido más posibilidades si le hubiera dado más distancia. En mi modesta opinión ahogó al toro con tanta cercanía. De todas maneras el toro tampoco era de triunfo.

López Simón mostro ganas, iniciando la faena al quinto de rodillas, pero después se embarulló. Torea muy vertical, excesivamente encimista y a veces atropella a la razón. Aun está verde y debe progresar. Su lote tampoco fue propicio.

El extremeño Rafael Cerro tiene muy buen corte. Ya nos sorprendió el pasado mes de julio siendo el triunfador de las novilladas sin picadores. Este torero tiene muy buena pinta, sabe torear y tiene pellizquito. En el tercer novillo cortó una justa oreja después de una bella faena en la que destacó el temple, la cadencia y la largura de sus muletazos. Los pases de pechos y los doblones finales fueron magníficos.

El domingo que viene esperemos que haga menos calor o habrá que poner aire acondicionado en el palco de los maestrantes para que no esté vacío.

E.D.