Tarde en blanco.

A veces se pregunta uno si ocurre algo con los novilleros que vienen a Sevilla, que en general y desde hace años están por debajo del ganado que se les brinda.
¿Quién hace de veedor de estos carteles de novilleros? ¿De donde salen las referencias para contratarlos? ¿O es que verdaderamente está el panorama tan malo? Lo cierto es que  no se puede venir a Sevilla con tan escaso bagaje de conocimientos, e incluso de ambición y valor, porque venir  en esta condiciones solo puede perjudicar al novillero cerrándole puertas por anticipado y terminar de minar la paciencia de la afición.
Es posible que el panorama de los novilleros en España entera sea este, pero hay que buscar soluciones porque  cobrar dinero por esto es dañar a la fiesta.

Ninguno de los tres novilleros de hoy dio la talla para estar aquí en este momento, no digo que no en otro.

Paco Chávez quiere ser torero-banderillero y por lo tanto el aprender a torear  no le parece tan importante. Tuvo un segundo novillo, cuarto de la tarde, de los que salen pocos en la temporada, pero lo lidió, banderilleó, y toreó de forma y manera que el novillo termino aburrido, pidiendo la cuenta.

Patrick Oliver es francés y tiene un parecido lejano a Sebastián Castella, lo cual es perfectamente normal y no criticable, es valiente y quiere hacer las cosas bien, pero está verde como una lechuga y venir en esas condiciones, ya dijimos, que no beneficia a nadie.

De Antonio Rosales bien poco que decir como no sea que estuvo toda la tarde con la pata patrás, en una desconfianza de torero consagrado al cual le queden 80 corridas por delante en la temporada.

Buenos los novillos de Ortega Cano con tres de ellos muy aprovechables. Aceptable el tercero, muy bueno el cuarto y bueno el sexto. Tres novillos con posibilidades de oreja no deja de ser una buena novillada.

Y el bendito publico esta tarde mas bendito que nunca, porque finalmente  terminaron por participar diciéndole a los novilleros lo que tenían que hacer. En la próxima montamos una escuela práctica y pedimos profesores que seguro que alguno salta al ruedo.

Paco